viernes, 8 de noviembre de 2013

EL SOSPECHOSO

El inspector Carmona había decidido acudir durante aquella mañana, al entierro de la asesinada Carmen Oliva en la creencia, al igual que la de sus colegas, de que los asesinos suelen acudir a la inhumación de sus víctimas, y en algunos casos, hasta colaboran con la familia en su localización. Por la forma en que fueron encontrados los restos, el policía se forjó dos prototipos de individuo: Un ladrón sorprendido por su víctima, que al forcejear con ésta, le entra el deseo de violarla; o bien, podría ser un individuo como el que tenía enfrente. Gafas con cristales de culo de vaso, con deseos de ser observado, mientras que su boca transmitía una sonrisa interior. Carmona decidió vigilarlo algún tiempo, hasta que pudiese descartarlo. Sin embargo, él se lo puso fácil. Dos días después, el policía durante su seguimiento descubrió, que en su mano derecha éste lucía el sello de oro, robado a la víctima. *Finalista del Concurso Microcrímenes Falsaria, Fnac, Bubok

No hay comentarios:

Publicar un comentario